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La fisioterapia es especialmente importante para los adultos de 65 años o más, ya que los músculos y las articulaciones tienden a perder fuerza y estabilidad con el tiempo. Este cambio puede repercutir negativamente en la independencia de los adultos mayores a la hora de realizar tareas y movimientos cotidianos, como cambiar de posición, ponerse de pie, caminar y subir y bajar escaleras.

¿Qué es la fisioterapia geriátrica?

La fisioterapia geriátrica es una forma de fisioterapia orientada específicamente a los adultos mayores y a sus problemas y desafíos únicos. La fisioterapia geriátrica tiene en cuenta que los adultos mayores tienden a ser menos activos con el tiempo, experimentan una disminución de la fuerza muscular, la coordinación y el tiempo de reacción, y tienen una menor tolerancia a la actividad física.
La fisioterapia geriátrica se diferencia de otros tipos de fisioterapia porque se centra más en el desarrollo de la fuerza y la resistencia de los adultos mayores para ayudarles en los siguientes aspectos

  • Mantener la actividad
  • Prevenir el desacondicionamiento (inversión del acondicionamiento previo)
  • Prevenir la atrofia muscular (el desgaste de los músculos)
  • Disminuir el riesgo de caídas y las lesiones relacionadas
  • Mantener la independencia en la realización de las actividades diarias

Rehabilitación adicional para adultos mayores

Otros servicios de rehabilitación para adultos mayores para restaurar la salud y el funcionamiento físico óptimo incluyen

  • Fisioterapia neurológica para tratar afecciones neurológicas como accidentes cerebrovasculares, lesiones cerebrales, lesiones de la médula espinal, esclerosis múltiple y enfermedad de Parkinson
  • Rehabilitación cardíaca para mejorar la resistencia y restablecer el funcionamiento cardíaco adecuado después de un ataque cardíaco o una operación de corazón
  • Terapia ocupacional para restablecer el control motor fino y el uso funcional de las manos para completar las actividades de la vida diaria

Resumen

La fisioterapia geriátrica se centra en ayudar a los adultos mayores a fortalecer los músculos que necesitan para realizar las tareas cotidianas, como caminar, subir escaleras y cambiar de posición. Por lo tanto, asistir a la fisioterapia geriátrica puede ayudar a los adultos mayores a mantenerse independientes y a prevenir otras afecciones que pueden producirse por la falta de actividad física, como la atrofia muscular. Mantenerse activo y hacer ejercicio es clave para envejecer de forma saludable y prevenir el desacondicionamiento y las afecciones crónicas que empeoran con la inactividad. Acudir a la fisioterapia geriátrica puede ayudarle a iniciar un estilo de vida más activo y puede proporcionarle ejercicios y consejos útiles para mejorar su fuerza, flexibilidad y equilibrio, lo que le ayudará en sus actividades diarias en casa.